¿Vida de placer? ¿o de sacrificio?
¿Tú qué eliges? Quieres vivir una vida llena de placer, bienestar, facilidad, risas y complicidad o una vida llena de sufrimiento, sacrificio, incomodidades, amargura y conflictos. Mira bien, relee bien, porqué elegí muy bien las palabras. Parecen adjetivos al azar, pero no lo son, ni el orden, ni que sean antagónicos… Fíjate bien, reelabora tu mirada sobre ese hecho que consideras, incómodo o pesado o cansino o inútil y mira a ver si percibes algo diferente. Fíjate si quizá mirando desde otro ángulo se percibe distinto. Mira a ver si cuando tu no estas incomod@, pesad@, cansad@ o no te sientes inútil, ese juicio cambia y por ende, el hecho cambia. Ya lo dijo Einstein: “La pregunta más importante a la que todos tenemos que responder es, ¿vivimos en un universo hostil o en un universo amigable?” Y pues, ¿tú que eliges? ¿que tu mundo sea hostil y debas vivir en el sacrificio? ¿ o en uno amable que te reporte placer? La luz del sol puede llenarte de alegría, de energía e iluminar las grandezas de tu vida o puede cegarte, hacer que te empequeñezcas y que a la afrenta de su verdad las mellas del tiempo te resulten imperdonables. ¿Qué eliges? Y desde eso al todo… Siempre, ¡tú eliges!
(Noviembre 2016)